Científicos chinos desarrollan una lengua artificial para medir el picante

Científicos chinos han desarrollado una nueva "lengua artificial" capaz de medir objetivamente el picante. El dispositivo, creado por un equipo de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China Oriental (ECUST), ofrece una alternativa imparcial a los catadores humanos, al tiempo que evita las molestias asociadas a la prueba de alimentos calientes.

El invento -detallado en la revista ACS Sensors- sustituye las papilas gustativas por un gel suave y flexible hecho de leche en polvo, ácido acrílico y cloruro de colina. El diseño imita la forma en que la leche alivia un paladar ardiente. Cuando el gel encuentra capsaicina (la fuente de calor de los pimientos), las proteínas de la leche incrustadas se unen al compuesto y se hinchan formando grupos. Esta reacción bloquea el flujo de iones, provocando una caída de la corriente eléctrica que el dispositivo traduce en una lectura precisa del picante en 10 segundos.

Para validar la tecnología, el equipo probó ocho chiles diferentes, estableciendo una escala de picor de 0 (soso) a 70 (extremadamente picante). Los resultados coincidieron estrechamente con las evaluaciones proporcionadas por panelistas humanos entrenados. El dispositivo también es capaz de medir el picante de otros alimentos, como la cebolla, el ajo y el jengibre.

El autor correspondiente del estudio, el profesor Hu Jing, subraya que la tecnología abre la puerta a un amplio abanico de aplicaciones, desde el control de calidad de los alimentos hasta el tratamiento médico. Los investigadores también creen que esta "lengua biónica" podría resolver por fin una importante laguna de la robótica, integrándose potencialmente con la IA para dotar a los robots humanoides de un sentido del gusto funcional.