Viajes espaciales con energía renovable: La ESA lanza la producción de combustible con hidrógeno verde

Por último, pero no por ello menos importante, la pequeña carrera entre los multimillonarios Bezos, Branson y Musk para encontrar el mejor camino hacia nuestra órbita ha planteado la cuestión de hasta qué punto son realmente sensatas o simplemente un despilfarro tales excursiones. Y si no hay mejores proyectos en los que invertir energía, tiempo y dinero.

Los satélites, la investigación en gravedad cero y el trabajo en materiales para las condiciones más extremas están definitivamente en el lado positivo para la humanidad.

La ESA también tiene previsto abordar los aspectos menos ventajosos, como la gigantesca huella de CO2 de los viajes espaciales. Al fin y al cabo, el vehículo de lanzamiento europeo quema entre 500 y 600 toneladas de combustible en cada lanzamiento, dependiendo de la carga útil. Al mismo tiempo, esto implica hidrógeno y oxígeno líquidos.

Ambos pueden obtenerse del gas natural. Sin embargo, ambos pueden obtenerse también por hidrólisis mediante electricidad. El hecho de que no falte energía solar en la Guayana Francesa, lugar de lanzamiento de Ariane, simplifica naturalmente el proceso.

El combustible obtenido a partir del agua estará disponible localmente a partir de 2026. Según las cifras actuales, se emitirá un 80% menos de dióxido de carbono durante el proceso de producción. Sin embargo, la primera fábrica sólo podrá producir una octava parte del combustible necesario anualmente para la propulsión de cohetes.

Los planes son, por tanto, de mucho mayor alcance. Sobre todo porque el 90% de la energía deberá proceder de fuentes renovables para 2030.

Las perspectivas de uso son interesantes, sobre todo en forma de generadores. Allí donde no exista una fuente de alimentación central, el hidrógeno necesario podría producirse de forma suficientemente compacta utilizando la energía solar, que abunda en casi todas partes, al menos de forma ligada.

Y cuando se necesite electricidad, un generador de hidrógeno se pondría en marcha donde actualmente funcionan generadores diesel.