Este robot es comestible, incluida la batería

Cuando se trata de robots¿quién no se pregunta si son comestibles? Hasta hace poco, probablemente nadie, pero el tema de los robots comestibles totalmente https://advanced.onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1002/advs.202509350 está cobrando cada vez más importancia. Científicos suizos han desarrollado ahora un robot blando que puede masticarse y tragarse entero, batería y actuadores incluidos.

Al igual que los robots blandos no comestibles, éste puede moverse mediante un sistema de bombas. Normalmente, los actuadores blandos y tragables que funcionan mediante presión de gas y, por tanto, requieren bombas, no pueden fabricarse sin plástico y metal. Sin embargo, en este caso, se utilizaron materiales como la cera y la gelatina - incluso los tubos para las bombas están hechos de gelatina.

¿Cómo se construye el robot comestible?

El equipo del Laboratorio de Sistemas Inteligentes de EPFL Universidad, dirigido por Dario Floreano, también ha encontrado la forma de hacer comestibles los elementos de alimentación - como parte del proyecto financiado por la UE RoboFood. Un robot blando suele moverse bombeando aire dentro y fuera de las cámaras de su cuerpo, provocando deformaciones y generando movimiento. En este caso, se utilizan recipientes separados que contienen bicarbonato sódico y ácido cítrico líquido para almacenar energía química, y se bombea dióxido de carbono a las cámaras como propulsor.

Una membrana hecha de bicarbonato de sodio garantiza una separación adecuada. La batería se activa aplicando presión a la membrana de la cámara de ácido. Una vez que la presión es lo suficientemente alta, el ácido atraviesa la membrana y se mezcla con el bicarbonato de sodio, desencadenando una simple reacción ácido-base. Esta reacción libera dióxido de carbono (CO₂) y citrato de sodio, una sustancia utilizada habitualmente en la industria alimentaria y considerada inocua.

Escenarios en los que podría utilizarse el robot comestible:

La idea original de los robots comestibles era administrar medicamentos a animales como los jabalíes, a los que la gente tiende a querer evitar acercarse demasiado. Dado que estos robots son baratos, biodegradables, seguros de transportar, móviles y se parecen a una presa, podrían ser útiles para administrar vacunas en casos de gripe porcina u otras enfermedades.

Sin embargo, actualmente también se están realizando ensayos con humanos. Por ejemplo, a principios de año se repartieron actuadores con sabor a fruta entre las personas, y ahora se está analizando su reacción. Además de la mensurabilidad básica, factores como la sostenibilidad también desempeñan un papel en la robótica. El director del proyecto, Darío Floreano, lo explica:

Si se mira desde la perspectiva más amplia de la robótica medioambiental y sostenible, el sistema de batería neumática y válvula es una tecnología facilitadora clave, porque es compatible con todo tipo de robots neumáticos biodegradables.