La actualización de la tercera parte de Final Fantasy 7 Remake podría impulsar las esperanzas de un lanzamiento simultáneo entre plataformas

Recientemente, Square Enix reveló que la trilogía Final Fantasy Remake abandonar su exclusividad para PS5. Eso generó expectativas de que la parte final de la serie pudiera estar disponible el primer día para múltiples plataformas. Durante el Tokyo Game Show, el director de Square Enix, Naoki Hamaguchi, habló de la estrategia del editor para evitar retrasos con Easy Allies.

Los juegos anteriores permanecieron bloqueados para la PS5 antes de recibir ports para PC. Sin embargo, el 22 de enero de 2026 Final Fantasy 7 Remake Intergrade debutará en las consolas Switch 2 y Xbox. Los rumores también han insinuado que Final Fantasy 7 Rebirth llegará a estos sistemas antes de finales de 2026. Mientras tanto, el desarrollo multiplataforma también está en marcha para el juego sin título Final Fantasy Remake Parte 3.

Los aficionados entusiasmados podrán disfrutar de los Juegos de Square Enix sin largas esperas. Aún así, existen dudas sobre cómo la empresa podrá desarrollar los títulos simultáneamente. Según Hamaguchi, se ha asignado un equipo independiente a Final Fantasy 7 Rebirth para la Switch 2. Mientras tanto, otro equipo se ha centrado en Final Fantasy Remake Part 3. La conclusión de la trilogía tiene a los desarrolladores encargados de optimizar el juego para cada plataforma.

Las dificultades de portar Final Fantasy 7 a cada plataforma

Como admite Hamaguchi, cada sistema plantea retos únicos para garantizar un rendimiento fluido. La Switch 2 es significativamente más potente que su predecesora, pero aun así no puede igualar las especificaciones de la PS5. Aunque Square Enix ha elogiado la consola portátil, los mundos abiertos del segundo y tercer remakes son más exigentes que el Remake Intergrade.

La Xbox Serie S también tiene limitaciones de memoria que pueden dificultar los lanzamientos multiplataforma. Contar con desarrolladores específicos que trabajen en cada plataforma podría suponer menos compromisos para los jugadores. Al mismo tiempo, si uno de los equipos se retrasa, eso podría dar al traste con las esperanzas de una pronta fecha de lanzamiento en todos los sistemas.