Llamada a revisión de la NHTSA en EE.UU: Los propietarios del Nissan Leaf advertidos del riesgo de incendio durante la carga rápida, caos en la producción del modelo sucesor

Nissan está experimentando actualmente importantes problemas con sus vehículos eléctricos en Estados Unidos. El primero de ellos es una llamada a revisión urgente por sobrecalentamiento durante la carga rápida de nivel 3 (carga de corriente continua). La NHTSA ha confirmado oficialmente la llamada a revisión de Nissan con el número de campaña 25V655000. Están afectadas unas 19.077 unidades del Nissan Leaf en todo el mundo de los modelos de los años 2021 y 2022 que están equipadas con un puerto de carga rápida de Nivel 3 (carga de CC a través de CHAdeMO).

El núcleo del problema radica en la batería de iones de litio: el aumento de la resistencia eléctrica causado por los depósitos en las celdas de la batería puede provocar el sobrecalentamiento de la misma durante la carga rápida de Nivel 3. Este sobrecalentamiento supone un grave riesgo para la seguridad y aumenta el riesgo de incendio.

Como remedio inmediato, se insta a los propietarios a abstenerse de utilizar la carga rápida de Nivel 3 hasta que se haya rectificado el defecto. Los concesionarios Nissan instalarán una actualización gratuita del software del sistema de control de la batería en los coches eléctricos afectados. Según la NHTSA, se espera que las cartas de notificación a los propietarios de los vehículos se envíen por correo a partir del 24 de octubre de 2025. El código interno de la llamada a revisión de Nissan es R25C8.

Estrategia de reestructuración bajo presión: el Leaf como faro de esperanza

Este escándalo de seguridad llega en un momento inoportuno para Nissan, ya que la empresa registró una importante pérdida neta en el ejercicio fiscal anterior y tiene puestas muchas esperanzas en la recién presentada tercera generación del Nissan Leaf para volver al éxito gracias a su estrategia de reestructuración.

El nuevo Nissan Leaf, que presenta por primera vez un estilo SUV y ofrece un aumento significativo respecto a su predecesor con una autonomía prometida de hasta 373 millas/600 kilómetros, se considera un modelo clave en los esfuerzos de reestructuración de la empresa.

La escasez de baterías frena la producción del nuevo modelo

Sin embargo, este nuevo y crucial vehículo eléctrico está experimentando actualmente enormes problemas de producción. Según informa Nikkei Asia, Nissan ha reducido a más de la mitad la producción del nuevo Leaf en su planta de Tochigi (Japón) durante el periodo comprendido entre septiembre y noviembre. Esto afecta a miles de unidades, cuya producción ha tenido que cancelarse o posponerse.

La razón aducida para los recortes de producción es una aguda escasez de baterías. La planta de Tochigi obtiene las baterías del fabricante AESC, una filial de Nissan. Por tanto, el rendimiento de la producción de las baterías necesarias no ha mejorado como se esperaba, lo que ha provocado cuellos de botella en la cadena de suministro.

Aún no está claro hasta qué punto se ve afectada también la producción europea del Nissan Leaf en Sunderland (Reino Unido). Sin embargo, los retrasos en Japón ponen de manifiesto los retos actuales a los que se enfrenta Nissan, cuyo éxito en la reestructuración se ha visto masivamente comprometido por los problemas en su negocio principal de movilidad eléctrica.