Polvo fino de los coches eléctricos: Un estudio de la UCLA revela un aumento de los niveles en las estaciones de carga durante la recarga rápida

Aunque los vehículos eléctricos no producen gases de escape, los neumáticos y los frenos sí producen emisiones en forma de partículas. Un nuevo estudio de la UCLA, publicado en UCLA Newsroommuestra que las estaciones de carga rápida son focos de contaminación a corto plazo.

Mediciones en estaciones de recarga de CC

En 50 estaciones de carga rápida de CC analizadas en Los Ángeles, los niveles de PM2,5 oscilaron entre 7,3 y 39 μg/m³, el doble que los niveles de la ciudad (3,6-12,4 μg/m³). Los niveles máximos alcanzaron los 200 μg/m³, mientras que las gasolineras y las calles más transitadas tenían niveles significativamente más bajos.

Causa: Ventiladores en armarios eléctricos

Según la UCLA, el estudio descubrió que los ventiladores de los armarios eléctricos que convierten la corriente alterna en continua para los cargadores de corriente continua levantan partículas de polvo. Los análisis de las partículas revelaron altas concentraciones de bario, cobre y zinc, típicas del desgaste de frenos y neumáticos. Se descartaron otras fuentes, como los motores diesel.

Medidas de protección

El investigador Yifang Zhu, del equipo de investigación de la UCLA, aconseja permanecer en el vehículo durante la carga rápida y utilizar el aire acondicionado o mantener la distancia. A largo plazo, los filtros de aire en los armarios eléctricos podrían reducir significativamente la exposición. El experto subraya que "no existe un nivel seguro de polvo fino cuando se trata de inhalación".