El recorte de precios de Tesla llega mientras BYD aboga por dominar el mercado mundial de vehículos eléctricos

Tesla no ha terminado de recortar los precios para seguir siendo competitiva en el despiadado mercado chino de los vehículos eléctricos, ya que acaba de rebajar el precio del Model Y en el equivalente a 1.900 dólares y ha mantenido un incentivo para el seguro del Model 3 también para el mes que viene. La rebaja de los precios de las versiones LR y Performance del Model Y se produce tras la caída de las ventas en julio de https://www.reuters.com/business/autos-transportation/teslas-china-made-ev-sales-slump-31-july-mm-2023-08-03/ de Tesla en China, justo cuando sus competidores locales, BYD, XPeng o NIO, registraron aumentos de ventas.

Es cierto que parte de la ralentización de las ventas de Tesla puede atribuirse a la inactividad de la Gigafactoría de Shanghái en preparación para un aumento de la producción, ya que el Modelo 3 Highland se acerca a su fase de producción en masa. Aun así, los fabricantes locales de VE siguieron las reducciones anteriores de Tesla con varias rondas de recortes de precios, mientras que un competidor directo como BYD vio cómo las ventas de su sedán Dolphin superaban a las de su equivalente del Model 3.

Para Tesla, luchar contra BYD, un fabricante integrado verticalmente que fabrica sus propias baterías, y muy competitivo, supone todo un reto. Recientemente, su consejero delegado lanzó un grito de guerra a los principales fabricantes de automóviles de China para que intensificaran sus esfuerzos de exportación global y "demolieran las viejas leyendas" de la industria automovilística.

Aunque es posible que BYD, NIO o XPeng nunca lleguen a acceder al mercado estadounidense, se han afianzado con creces en Europa y Asia. A pesar de que los precios de exportación pueden duplicar los de sus coches en China, no dejan de ganar cuota de mercado con coches eléctricos de alta calidad vendidos a precios más bajos que los de la competencia local, cuyos vehículos eléctricos suelen ser inferiores en cuanto a especificaciones y prestaciones.

Según el presidente de BYD, Wang Chuanfu, durante un discurso de ánimo la semana pasada, "esuna necesidad emocional de los 1.400 millones de chinos ver cómo una marca china se convierte en global" Su presentación en vídeo terminó con el grito de guerra de "derribar las viejas leyendas y lograr nuevas marcas de clase mundial, los coches chinos".

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