Al estancarse las ventas de Cybertruck, Elon Musk compra él mismo el inventario

Tesla sigue bajo presión: El Cybertruck, que en su día fue aclamado como un proyecto de futuro, se está convirtiendo poco a poco en un niño problemático para la empresa. Tras las revelaciones de que las ventas del Cybertruck han estado muy por debajo de las expectativas, parece que ahora Elon Musk se limita a comprar el inventario no vendido del futurista camión eléctrico a través de sus propias empresas. Según ElectrekspaceX y xAI han adquirido varios cientos de Cybertrucks en las últimas semanas. Oficialmente, la medida se enmarca como una transición de los actuales coches de empresa impulsados por gasolina a los vehículos eléctricos. Sin embargo, los críticos creen que el motivo principal es reducir el inventario de Cybertrucks sin vender e inflar las cifras de ventas, que no pintan nada bien para el fabricante de automóviles estadounidense.

En un principio, Tesla había previsto unas ventas anuales de hasta 300.000 Cybertrucks. Sin embargo, la empresa sólo vendió unas 5.000 unidades en el primer trimestre de 2025. Los informes de los medios de comunicación indican que miles de Cybertrucks sin vender se están acumulando en la fábrica de Tesla en Austin. Ni siquiera los recortes sustanciales de precios han parecido lograr un cambio de tendencia sostenido.

Los vehículos adquiridos por SpaceX y xAI se están desplegando en lugares como la Starbase de Boca Chica, la fábrica Starlink de Bastrop y las instalaciones de xAI. Las observaciones del canal de YouTube NASASpaceflight confirman que varios Cibercamiones han sido trasladados al complejo de Starbase en los últimos días. Un vídeo de YouTube sugiere que estos cibercamiones están destinados a sustituir a los vehículos más antiguos de la empresa, aunque algunos especulan con la posibilidad de que los camiones sean entregados a los empleados.

En resumidas cuentas: Elon Musk está aparentemente intentando abordar la lenta demanda de Cybertrucks desde dentro. Mientras que los partidarios ven la medida como un paso pragmático hacia la electrificación de la flota, los detractores la califican de escaparate. Queda por ver si las compras de SpaceX y xAI aliviarán la presión sobre Tesla a largo plazo. Por ahora, sin embargo, la compañía de coches eléctricos puede al menos respirar aliviada.