La NASA descubre los "signos más claros de vida en Marte" jamás encontrados

Se han descubierto rocas inusuales en Marte que podrían aportar pruebas de la existencia de vida en el pasado en el planeta. Se trata de un tipo de roca arcillosa de 3.500 millones de años de antigüedad hallada por el Rover Perseverance de la NASA en el lecho de un río seco en una región llamada cráter Jezero.

Las rocas muestran patrones inusuales que recuerdan a las manchas de un leopardo. Los investigadores creen que estas manchas pueden haberse formado por reacciones químicas relacionadas con antiguos procesos microbianos en Marte. La Nasa ha afirmado que podrían ser los signos de vida más claros jamás encontrados. Sin embargo, otra teoría especula con que las causas podrían ser procesos geológicos naturales. Para ello habrían sido necesarias temperaturas más elevadas, y las piedras no parecen haberse calentado intensamente. El profesor Sanjeev Gupta, científico planetario del Imperial College de Londres, lo explica:

No habíamos tenido algo así antes, así que creo que ése es el gran problema. Hemos encontrado rasgos en las rocas que si se vieran en la Tierra podrían explicarse por la biología, por un proceso microbiano. Así que no estamos diciendo que hayamos encontrado vida, pero sí que nos da algo que perseguir.

Aunque Marte parece hoy un desierto frío, hay pruebas de que tuvo una atmósfera mucho más densa y grandes cantidades de agua líquida en su superficie hace miles de millones de años. Los océanos y los ríos lo convirtieron en un planeta más cálido y húmedo. La Dra. Nicola Fox, subdirectora de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA, declaró sobre el descubrimiento en una conferencia de prensa:

Es como ver un resto fósil. Tal vez era una comida sobrante, tal vez esa comida ha sido excretada y eso es lo que estamos viendo aquí.

Si esto es de hecho potencial evidencia de una biofirma o si se trata de un origen no biológico -lo que los investigadores consideran menos probable- aún está por ver. Los investigadores sólo obtendrán respuestas definitivas cuando se examinen las rocas en la Tierra